VII REUNION ANUAL EN EL PUEBLO DE TAMAYO (BURGOS-ESPAÑA)
Tamayo, 8 de agosto de 2015
Tal y como estaba previsto acudimos el sábado pasado a pasar unos buenos ratos en Tamayo, como buenos amigos y saludando al pueblo.
El camino acceso por carretera, a pesar de a haber retrasado la fecha, fue interminable por la gran afluencia de turistas en la carretera, sufriendo importantes atascos y cuando habitualmente tardamos dos horas en llegar desde Donostia, ayer nos costó tres horas y media. Entre los tertulianos estuvimos comentando esta circunstancia y se valoró la posibilidad de realizar un nuevo cambio de fechas.
Este año acudimos una cantidad de personas similar a otros años, 21, y procedíamos de Irún, Pasai Donibane, Orereta-Rentería, Donostia. El tiempo que nos acompañó no era bueno, era fresco y a ratos lluvioso.
Pili e Ismael nos invitaron a organizar el aperitivo en un local de su propiedad en el propio pueblo. Resultó un acierto porque era un lugar acogedor, amplio y cubierto. Hicimos nuestra su propuesta de realizar el próximo año nuestras actividades allí mismo, el aperitivo, la comida y la convivencia. Nos pareció una idea genial poder celebrar en el propio pueblo de Tamayo nuestro encuentro en su totalidad, sin tener que desplazarnos a otro pueblo.
Dimos buena cuenta de la morcilla, bacalao, croquetas, jamón, aceitunas acompañado de vino que nos trajeron unos familiares de Pili desde Valladolid, txakoli, sidra, cerveza y agua.
Fue un día de conversaciones animadas y de planes. Lo que hasta ahora ha sido una iniciativa individual, nos planteamos que la actividad en adelante la organizase y controlase un grupo de personas, que nos hemos comprometido a reunirnos en breve.
Este es el grupo que nos reunimos este año: Eusebio, Rosa, Txema, Bego, Jorge, Arrate, Pili, Ismael, Aiziber, Carlos, Puri, Gurutz, Ramón, Pilar, Miguel, Eduardo, Edurne, Josean, Asun, Javier, Engrazi.
Grupo de personas reunidos este año 2015
Entregamos a Ismael un nuevo cartel indicador del pueblo para colocar a la entrada, con el fin de reponer el desaparecido. Él se encargó de su colocación.
Una vez finalizado el aperitivo nos desplazamos a Oña para comer en “El rincón del convento”, restaurante ubicado cerca de la instalación del Monasterio de San Salvador de Oña. Tuvimos una comida muy agradable, seguido de un café en la plaza del pueblo.
Nos despedimos después de que Josan nos alegrara la tarde cantando con mucha gracia unas habaneras.
Algunos se quedaron en la zona porque habían acudido para pasar el fin de semana y otros cogimos los coches para volver a nuestras casas, no sin antes aprovisionarnos de unas cuantas morcillas de la carnicería de “Rojo”, tan famosas.
El año que viene volveremos a juntarnos pero con otras perspectivas, pasando todo el día en Tamayo y realizando planes de futuro.
Esto queremos que sea una invitación para que acudáis más personas a conocer el pueblo y su historia.
¡SALUDOS PARA TODOS Y OS ESPERAMOS¡
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